¿Tenemos derecho al olvido en internet? Dos consejos para limitar la publicación de información privada en buscadores

Hace una semana el Tribunal de Justicia de la UE daba la razón a Google frente a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) al dictaminar que los buscadores no son responsables de los datos personales de las webs que se indexan, es decir, que actualmente no existe un derecho al olvido que se pueda aplicar de manera general, si bien tendremos que esperar unos meses para conocer la sentencia.

La noticia ha dado la vuelta al mundo y ha generado mucha polémica. Parte de un caso que se remonta a 2010,  cuando un ciudadano reclama legalmente a la AEPD y a Google para que se que elimine cierta información que aparece en el buscador relacionada con una deuda suya que ya había sido pagada. Ante la negativa respuesta por parte de ambas entidades, finalmente la AEPD emprende acciones legales contra Google España y el caso termina en los tribunales europeos.

Por lo tanto, ahora mismo es el ciudadano el que debe acudir a la fuente original (el portal web) y solicitar que se borre la información que no quiera que aparezca. Los buscadores se consideran, por ende, meros almacenes de información, sin responsabilidad sobre los datos personales que guardan.

Desde aquí os propongo 2 sencillas acciones con las que podemos evitar casos como éste o limitar su impacto:

1. Indicar al motor de búsqueda que no indexe determinado contenido desde el inicio. Si somos propietarios de un sitio web, existe una forma de avisar a los buscadores de que determinado contenido es privado y no queremos que se publique. Debéis saber que hasta los archivos pdf son susceptibles de indexarse, por lo que si queremos colgar en nuestro portal cierta información (una imagen, un documento, una página…) pero no queremos compartirla con cualquiera, esto lo podemos configurar en un archivo de texto llamado robots.txt.

Este fichero, que debe almacenarse en el directorio raíz de vuestra web (si no sabéis cómo subirlo, hablad con vuestro webmaster) contiene las recomendaciones que deben cumplir los robots de búsqueda. Su funcionalidad es bastante amplia, pero en el caso que nos ocupa sería suficiente con escribir una sentencia “Disallow” por cada url/documento/imagen que no queremos que se indexe. Por ejemplo:

    • User-agent: *  (con esta línea indicamos que lo siguiente se aplicará a todos los buscadores, ya que es posible personalizarlo por buscador).
    • Disallow: /mi-carpeta-privada  (para bloquear el acceso a un directorio concreto)
    • Disallow: /info/mi-archivo-privado.pdf  (para bloquear el acceso a un archivo)
    • Disallow: /directorio/mi-pagina-privada.html  (para bloquear una url)
    • Disallow: /  (con esto informamos de que no queremos indexar nada del sitio)

No es necesario incluir el nombre del dominio. Tampoco olvidéis que el hecho de que el buscador no pueda acceder a una url o un documento no quiere decir que nadie lo pueda hacer. Si alguien conoce esa dirección, podrá ver el contenido igualmente. Lo que evitamos es que aparezca en las búsquedas. Si queréis que nadie pueda acceder, entonces necesitaréis crear en vuestro sitio web un acceso privado. Todo lo que esté bajo un entorno protegido mediante usuario o contraseña tampoco puede ser indexado por los buscadores.

La información completa sobre este archivo la tenéis aquí:

2. Configurar alertas con términos clave como nuestro nombre, teléfono, DNI, el nombre de nuestra empresa, etc. De esa forma, cada vez que el buscador indexe información que coincida con lo que hemos marcado, nos avisará inmediatamente. Esto se puede hacer para el buscador Google a través de Google Alerts. Yahoo! también dispone de un servicio similar a través de Yahoo! Alerts.

Toda la información para crear las alertas en Google aquí:

Google Alerts

¿Os ha resultado útil?

Author: Enrique Clemente