Un MacBook, wi-fi y un pijama

8 cosas que todo CM freelance sabrá de qué hablamos.

La acuciante crisis económica de los últimos años, la precarización del mercado laboral y la búsqueda de nuevos horizontes laborales ha llevado a un combo vital a muchas personas de este país: ser Community Manager y ser freelance. Todo al mismo tiempo. No son muchas las empresas que pueden permitirse el sueldo mensual de un CM, con lo que la aparición del autónomo, junto las ganas de ahorrarse un dinerillo, es una realidad fehaciente en estos nuestros días. Eso nos lleva a un puñado de profesionales trabajando cada día en sus casas. Con su portátil, su wi-fi que pagan mensualmente a precio de brillante con nombre polaco, y su pijama de cuadros de H&M afelpado. Una situación que lleva a momentos cotidianos que cualquiera que entienda esto seguro que ha vivido alguna vez. Este es un post para sacar un poco de hierro al asunto y saber reírnos de nuestra realidad. No pretende ser un análisis concienzudo ni del intrusismo en el sector, ni de la precariedad freelance ni cualquier intelectualidad que alguno quiera darle.

Así que repasemos 8 momentos que cualquier Community Manager freelance ha vivido en sus carnes:

1.No tengo horarios, ¡soy libre! – Bueno, digamos que una libertad esclavizada. Sí, puedes tomarte una tarde libre de vez en cuando. O algún día levantarte tarde si la noche anterior se ha complicado. Incluso quedarte viendo los partidos de pelota vasca en Neox mientras desayunas. Pero el trabajo que tienes que hacer es el mismo, y hay que sacarlo. Puedes posponerlo, pero el trabajo no se esfuma. Ni a las 5 de la tarde puedes levantarte y olvidarte hasta la mañana siguiente. No amigo. Luego vienen los domingos por la mañana respondiendo comentarios en Facebook, las largas noches haciendo informes de analítica o la monitorización de un hashtag el día de Navidad.