Google cierra Orkut en septiembre. Esto es así. Aunque probablemente no te afecta en absoluto, ¿verdad? ¿Orkut? ¿Qué es eso de Orkut?, te preguntarás. Ni más ni menos que la primera red social de Google, y también la primera en la que me registré (hace ya años), pero que en España apenas se ha usado.
Estamos en 2005. Una mañana recibo un mail. Es una invitación de un amigo para unirme a algo llamado Orkut, algo que dice ser una “red social”.
– “¿Una red social?” – Le pregunto a ese amigo – “¿Y eso qué es?”
Me dice que ha leído que las redes sociales son el futuro, que van a pegar fuerte y que lo dicen todos los blogs.
Entro. Me registro. Curioseo un poco. Nada. ¡Aquello era un páramo! Casi podía ver las pelotitas del desierto rodando por allí. Claro, al no tener amigos registrados, no veía actividad alguna.
Tras un rato de aburrimiento y de hacer clic aquí y allá, sentencié: “Pues yo a esto de las redes sociales no le veo la gracia. Esto no puede ser el futuro”. Y aquí estoy, 10 años después, trabajando precisamente en ese medio. Vamos, que acertar acertar, acerté más bien poco.
Sin saberlo, estaba descubriendo que una red social sin amigos, sin gente, es como un cascarón vacío. ¿Qué hace falta para que una red social triunfe? Si lo supiera ahora mismo sería rica, pero diría que hay, al menos, 2 factores fundamentales, la masa crítica y la innovación continua.
Orkut contra La Masa (crítica)
La masa crítica en sociología es la “cantidad mínima de personas necesarias para que un fenómeno concreto tenga lugar. Así, el fenómeno adquiere una dinámica propia que le permite sostenerse y crecer” (Wikipedia).
Que haya mucha gente de tu entorno te invita a participar en una red social y no en otra, porque es donde están tus amigos. La masa crítica es por lo que la gente usa Whatsapp y no Telegram. Y es por lo que Orkut se ha mantenido muchos años en Brasil como la red social más importante.
¿Y la innovación? La innovación trabaja en el largo plazo. La innovación es eso de lo que los usuarios se quejan (¿quién no ha oído eso de “¡Odio el nuevo Facebook!”?), pero que consigue que un servicio siga siendo atractivo para el usuario. La falta de innovación es probablemente lo que hizo que MySpace languideciera, hasta que en 2008 fue superada en usuarios por Facebook y seguramente es una de las causas de la desaparición de Orkut.
Orkut, Buzz y ahora Google+: ¿a la tercera va la vencida?
Diría que la sentencia de muerte de Orkut estaba firmada en el momento que Google apuesta por Google+. Además, poco a poco, perdían la batalla en Brasil contra la potente Facebook. Ocurre más o menos lo mismo en España, donde los usuarios de Tuenti están migrando a Facebook para poder interactuar también con sus amigos de fuera del país.
Después, en 2010, llegó Buzz, el segundo intento fallido de Google por tener su papel en “lo social”. Buzz era un servicio curioso, que funcionaba dentro de Gmail y que duró bastante poco, ya que en 2013 se cerraba definitivamente.
Ahora, en la tercera intentona, la compañía ha hecho de Google+ su bandera, una red social que más bien funciona como una “capa social” que envuelve e integra todos los productos Google. Y parece que van en serio.
La existencia de Orkut desde luego no encajaba en esta estrategia y hace tiempo que parece que nadie en Google se ha acordado de ellos. De hecho, si entras a su web, verás que el aspecto de la misma es como viejuno. Añejo. Falto de “cariño”.
¿Y toda esa base de usuarios? ¿No tienen miedo de perderla con el cierre de Orkut? Me imagino que no, ya que para registrarse en Orkut es necesario tener una cuenta de Google y, a su vez, si tienes una cuenta de Google o Gmail es prácticamente imposible no acabar registrándote también en Google Plus.
¡Adiós, Orkut!
Así que, después de 9 años registrada me despido de Orkut sin prácticamente haberla usado (excepto brevemente para un cliente portugués de la agencia donde trabajaba en 2.009).
Gracias por ser mi primera red social y por los buenos ratos que seguro has hecho pasar a millones de brasileños.
¿Por qué cierra Orkut? Auge y caída de la primera red social de Google
Etiquetas: cierre de orkut, google, orkut
Google cierra Orkut en septiembre. Esto es así. Aunque probablemente no te afecta en absoluto, ¿verdad? ¿Orkut? ¿Qué es eso de Orkut?, te preguntarás. Ni más ni menos que la primera red social de Google, y también la primera en la que me registré (hace ya años), pero que en España apenas se ha usado.
Estamos en 2005. Una mañana recibo un mail. Es una invitación de un amigo para unirme a algo llamado Orkut, algo que dice ser una “red social”.
– “¿Una red social?” – Le pregunto a ese amigo – “¿Y eso qué es?”
Me dice que ha leído que las redes sociales son el futuro, que van a pegar fuerte y que lo dicen todos los blogs.
Entro. Me registro. Curioseo un poco. Nada. ¡Aquello era un páramo! Casi podía ver las pelotitas del desierto rodando por allí. Claro, al no tener amigos registrados, no veía actividad alguna.
Tras un rato de aburrimiento y de hacer clic aquí y allá, sentencié: “Pues yo a esto de las redes sociales no le veo la gracia. Esto no puede ser el futuro”. Y aquí estoy, 10 años después, trabajando precisamente en ese medio. Vamos, que acertar acertar, acerté más bien poco.
Sin saberlo, estaba descubriendo que una red social sin amigos, sin gente, es como un cascarón vacío. ¿Qué hace falta para que una red social triunfe? Si lo supiera ahora mismo sería rica, pero diría que hay, al menos, 2 factores fundamentales, la masa crítica y la innovación continua.
Orkut contra La Masa (crítica)
La masa crítica en sociología es la “cantidad mínima de personas necesarias para que un fenómeno concreto tenga lugar. Así, el fenómeno adquiere una dinámica propia que le permite sostenerse y crecer” (Wikipedia).
Que haya mucha gente de tu entorno te invita a participar en una red social y no en otra, porque es donde están tus amigos. La masa crítica es por lo que la gente usa Whatsapp y no Telegram. Y es por lo que Orkut se ha mantenido muchos años en Brasil como la red social más importante.
¿Y la innovación? La innovación trabaja en el largo plazo. La innovación es eso de lo que los usuarios se quejan (¿quién no ha oído eso de “¡Odio el nuevo Facebook!”?), pero que consigue que un servicio siga siendo atractivo para el usuario. La falta de innovación es probablemente lo que hizo que MySpace languideciera, hasta que en 2008 fue superada en usuarios por Facebook y seguramente es una de las causas de la desaparición de Orkut.
Orkut, Buzz y ahora Google+: ¿a la tercera va la vencida?
Diría que la sentencia de muerte de Orkut estaba firmada en el momento que Google apuesta por Google+. Además, poco a poco, perdían la batalla en Brasil contra la potente Facebook. Ocurre más o menos lo mismo en España, donde los usuarios de Tuenti están migrando a Facebook para poder interactuar también con sus amigos de fuera del país.
Después, en 2010, llegó Buzz, el segundo intento fallido de Google por tener su papel en “lo social”. Buzz era un servicio curioso, que funcionaba dentro de Gmail y que duró bastante poco, ya que en 2013 se cerraba definitivamente.
Ahora, en la tercera intentona, la compañía ha hecho de Google+ su bandera, una red social que más bien funciona como una “capa social” que envuelve e integra todos los productos Google. Y parece que van en serio.
La existencia de Orkut desde luego no encajaba en esta estrategia y hace tiempo que parece que nadie en Google se ha acordado de ellos. De hecho, si entras a su web, verás que el aspecto de la misma es como viejuno. Añejo. Falto de “cariño”.
¿Y toda esa base de usuarios? ¿No tienen miedo de perderla con el cierre de Orkut? Me imagino que no, ya que para registrarse en Orkut es necesario tener una cuenta de Google y, a su vez, si tienes una cuenta de Google o Gmail es prácticamente imposible no acabar registrándote también en Google Plus.
¡Adiós, Orkut!
Así que, después de 9 años registrada me despido de Orkut sin prácticamente haberla usado (excepto brevemente para un cliente portugués de la agencia donde trabajaba en 2.009).
Gracias por ser mi primera red social y por los buenos ratos que seguro has hecho pasar a millones de brasileños.
Adiós, Orkut.