Los foros como medio de difusión

Hay una cosa que antes o después los clientes a los que gestionáis las redes sociales os pedirán que hagáis, si es que no lo han hecho ya. No me gusta ir de lista, pero estoy segura de que lo harán. Si no es así, yo pago las cañas.

 

La idea brillante

idea

Imagen: Dennis Wilkinson

Siempre llega ese día maravilloso en el que el sol brillaba, los pajaritos tuiteaban y todo estaba tranquilo hasta que el cliente te llama porque ha tenido una idea fantástica, que además te cuenta con un tono que denota que se te tenía que haber ocurrido a ti. “Vamos a dinamizar esta acción/concurso/lo-que-sea en los foros. ¡No estamos aprovechando el poder de todos los que existen especializados en nuestro sector!”

Si te pilla de nuevas puede que incluso pienses que tiene razón. Y en parte la tiene: los foros pueden llegar a ser una herramienta bastante poderosa si se utilizan bien. Pero atención a la última parte de la frase: SI SE UTILIZAN BIEN. Y entrar en 10, 20 ó 50 foros de repostería a decir “Si te haces fan de pastelerías López te regalamos una napolitana” es:

– mucho más trabajoso de lo que parece

– inútil

– contraproducente

– SPAM.

 

¿Cómo explicárselo al cliente?

PlanAplanB

Imagen: Marsmett Tallahassee

Él se ha levantado especialmente lúcido, está muy contento con su idea y espera que simplemente se lleve a cabo. Así que te toca llamarle, mandarle un mail o irte a verle, lo que tú prefieras o como sepas que te hará más caso o te entenderá mejor. Y directamente, explicarle los puntos que hemos mencionado más arriba. Vamos por partes:

– Muchas horas de trabajo. En primer lugar es necesaria una buena labor de investigación para conocer los foros más importantes del tema que nos ocupa. En determinados sectores, es probable que los tengamos claros y los utilicemos en nuestra labor de monitorización, pero en otros muchos, sobre todo si llevamos poco con el cliente, nos va a pillar de nuevas, así que tendremos que dedicar tiempo a encontrar los que son verdaderamente interesantes, tienen usuarios, son activos… Una vez que los localizamos, entramos en materia. Publicar en un foro por primera vez implica una serie de pasos que todos conocemos: registrarse, introducir el código captcha y los datos que requiera, autentificar el email, elegir nombre de usuario y contraseña… Esto, multiplicado por tantos foros como hayamos detectado, puede llegar a ser una labor complicada, que requiera, entre otras cosas, elaborar un Excel en el que apuntemos cada contraseña porque en unos tendrá que ser de 6 caracteres, en otros de 8, en uno deberá llevar letras y números, en otros mayúsculas y minúsculas…

– “Pa ná”. Una vez que hemos hecho todo esto, entramos muy contentos a cada uno de los foros y publicamos que tenemos una noticia que seguro que les impactará, les impresionará y les cambiará la vida: nuestra pastelería regala la consabida napolitana. ¿Y qué nos encontramos? En un alto porcentaje de los casos, que el moderador considera, (cómo son…) que si su foro no nos ha interesado lo más mínimo hasta este momento, puede que no sea un lugar donde publicitarnos por la cara. Así que simplemente, elimina el post. En los pocos sitios donde esto nos ocurra, veremos cómo nuestro hilo va quedando cada vez más abajo, sin respuestas y sin nuevos fans que hayan salido corriendo del sitio en el que estaban compartiendo dudas sobre levadura para entrar a formar parte de nuestra comunidad. Y es que ¿por qué tienen que hacer caso a un nuevo usuario al que no conocen y que nunca les ha aportado nada? Incluso en el caso de que sea una marca conocida de sobra por ellos, ¿quién les asegura que es cierto y no es un aprovechado que usa el nombre para conseguir notoriedad?

– Mala imagen. Lo peor de todo es que, terminado el trabajo de chinos, no es que no hayamos obtenido ningún resultado. Sí hemos conseguido algo, y es que los que gestionan los foros del sector que nos interesa nos miren con desconfianza. Bastantes horas les lleva a ellos moderar las conversaciones para que venga el listillo de turno (o sea, nosotros) a aprovecharse de la comunidad que han creado para darse a conocer.

– Por nada del mundo debemos consentir que nuestra imagen profesional se vincule al spam. Debería ser una cuestión de principios, pero si no es así, busquemos la parte práctica: ¿contrataríais a alguien cuya estrategia se basa en este tipo de prácticas? Pues eso.

 

Y entonces, ¿cómo se hace?

Si queremos sacarle partido a los foros, nadie nos librará del primer paso, que puede ser tedioso pero es necesario: búsqueda de los más interesantes, registro, etc. Pero una vez que hayamos hecho esto, empieza un trabajo que puede ser tan gratificante como el de gestionar cualquier red social: si nos encargamos de buscar contenido interesante para compartir, de responder aquellas dudas que les puedan surgir a otros usuarios sobre temas relacionados con lo que nos ocupe (ojo, sin intentar vender) y si generamos conversación, nos haremos “un nombre” dentro de ese grupo, que puede ser reducido pero seguro que también es muy interesante. Y es que no se trata de hacer autobombo, sino de ofrecer valor añadido.

Una vez que hayamos conseguido esto, sí podremos consultar con el moderador si no le parece mal que publiquemos determinada promoción, concurso o acción especial que estemos llevando a cabo. También podemos redirigir de forma puntual a nuestra web o a nuestras redes, cuando pensemos que de verdad puede ayudar al que está preguntando algo concreto o buscando un producto o servicio que podemos ofrecerle. Esto sí funciona. Porque está bien hecho.

Ahora bien, como podéis imaginar, en este caso cada foro se convierte en un lugar al que dedicar prácticamente las mismas horas que a cualquier otra red, por lo que es un trabajo que debe ser presupuestado aparte.

Por lo tanto, debemos hacer entender al cliente que no es que no nos apetezca echar unas horas extra un par de días, sino que las cosas se pueden hacer, pero sólo si se hacen bien. Y que esto conlleva un tiempo y un esfuerzo que, evidentemente, se paga.

Y como ya sé lo que estáis pensando… no, si os lo piden no hace falta que invitéis a cañas. ;) Pero sí que me encantaría que nos contaseis cómo gestionasteis la respuesta y cuál fue la decisión final. ¡A ver quién es el primero en tener un cliente lúcido!

Author: Esther Rosado

One Response to "Los foros como medio de difusión"

  1. […] Difunde tu palabra en los foros. En muchas ocasiones, los que nos dedicamos a esto de la gestión de las redes sociales, nos solemos olvidar de los Foros. Esas comunidades en las que aunque no lo creamos hay mucha, pero que mucha gente que puede ser parte de tu público objetivo. Por eso, nos ha gustado este artículo, que además de recordarnos la importancia que tienen los foros nos cuentan en un tris algunos consejitos para optimizar esta herramienta. […]